Los seres humanos somos animales muy desarrollados, que en un periodo enclave de la pre-historia comenzamos a aprender y adquirir hábitos de todas las demás especies que nos rodeaban, esta pluralidad de actitudes nos enseño muchas formas más de sobrevivir que yendo al choque con nuestras garras, o esperar bajo la lluvia a que salga el Sol como hacen muchos simios. Los seres humanos comprendieron que cultivar el cuerpo era una chance más de marcar la cancha, como también aprendieron a orientarse a partir de los elementos siempre constantes de la naturaleza. Observaron las plantas y las hojas en lugar de comerlas y se sintieron exitosos cuando comenaron a transformar muchos de los aspectos de sus realidad en su favor.

Hoy la figura humana esta completamente estilizada y es muy distante de lo que fueron nuestros antepasados, alrededor de quince mil años atrás. Más aún de los primeros simios que buscaron comunicarse unos con otros para obtener alguna ventaja respecto de los problemas que vivían. La cultura nos ha alejado de la naturaleza, pero debemos recordar siempre que nuestros hermanos animales todavia vivien con nosotros y necesitamos estar en armonía con los mismos, cuanto más presente tenemos estas ideas mejores cosas se nos ocurren para mejorar nuestra calidad de vida.

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