La infancia es una etapa muy particular de la vida, todas las etapas son muy importante pero en la infancia uno se encuentra muy permeable a la realidad y a incorporar muchas cosas de la misma en su propia esencia. Todo lo que se vive con gran valor e importancia en la infancia adquiere un estatuto muy especial y es muy dificil de cuestionar en otras oportunidades de la vida. Incluso muchas cosas que vivimos en la infancia se re-significan con posterioridad y siguen siendo pilares de lo que significa la personalidad y las formas de conducta de las personas.

A los niños hay que estimularlos con todo tipo de acciones, no importa que estas no hagan pie en los talentos más naturales del niño, como puede ser la actividad motriz o su intelectualidad, los libros hacen a los jugadores de futbol y el deporte hace a los genios. Por supuesto que hay que estimular las virtudes y todo aquello que les sale más fácil, pero adentrarlos en terrenos más complejos para ellos los convierte en personas más completas, y son las personas más completas aquellas que triunfan con notable lucidez. Son todos detalles a tener en cuenta, que pueden tener mucho resultado.

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